Bitcoin podría entrar nuevamente en un bull run

Recientemente terminé un viaje de esquí en el hemisferio sur, donde principalmente realicé actividades de esquí de fondo. Esta actividad requiere un gran consumo de energía, superando las 4000 kcal de gasto energético diario. Para mantener el rendimiento, adopté una estrategia que combina la ingesta de azúcares de liberación rápida y "comida real" de quema lenta.

Esta estrategia dietética puede compararse con la importancia relativa de los precios y cantidades en la política monetaria. Powell anunció recientemente un cambio en la política, y la Reserva Federal finalmente se comprometió a reducir las tasas de interés. Los funcionarios del Banco de Inglaterra y del Banco Central Europeo también han indicado que continuarán reduciendo las tasas.

El mercado ha reaccionado positivamente, con un aumento generalizado de los activos de riesgo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esto podría reducir el diferencial de tasas entre las principales monedas y el yen, reavivando el riesgo de arbitraje con el yen. A menos que se aumente la cantidad de moneda a través de la expansión del balance.

Desde el punto de vista económico, la Reserva Federal debería aumentar las tasas de interés en lugar de reducirlas. La inflación sigue siendo superior al objetivo, el déficit gubernamental es récord y el crecimiento del PIB es sólido. Sin embargo, la Reserva Federal eligió reducir las tasas, lo que responde más a consideraciones políticas, esperando mantener el aumento de los precios de los activos.

Si el yen se aprecia significativamente, podría contrarrestar los efectos positivos de la reducción de tasas. Para hacer frente a esta situación, la Reserva Federal y el Tesoro podrían verse obligados a adoptar más medidas de flexibilización, incluyendo detener la reducción de balances y reiniciar la expansión cuantitativa.

Para los poseedores de criptomonedas, los factores favorables actuales incluyen: la reducción de tasas de interés por parte de los bancos centrales globales, el aumento de liquidez por parte del Tesoro de Estados Unidos, y la cautela del Banco de Japón respecto a la apreciación del yen. En este entorno, activos con suministro limitado como Bitcoin podrían beneficiarse.